Tolerancia, inclusión, amor, respeto es lo que desean las personas que viven de cerca con el autismo. Y así como padres y madres comunes, sin fama ni dinero, luchan a diario para sacar a sus hijos adelante, así mismo lo hacen algunas celebridades que también tienen familiares con este trastorno.
¿Qué es el autismo?
El autismo es un trastorno psicológico que tiende a dificultar la capacidad de comunicarse y de interaccionar con la sociedad, el mismo que también es conocido como Trastorno del Espectro Autista (TEA) se manifiesta en los tres primeros años de los niños y perdura hasta que fallecen.
Sí, suena drástico, pero no es el fin del mundo, al contrario, es la entrada a uno nuevo y maravilloso, lleno de sorprersas y retos. Los padres y madres de niños autistas no se resignan contra la fatalidad del pronóstico y apuestan al futuro. Esta condición no discrimina y puede afectar a cualquiera, por eso existen varias estrellas de Hollywood que están comprometidos con la crianza de sus hijos autistas, y en algunos casos, participan de eventos solidarios para recaudar fondos para la investigación de esta enfermedad y ayudar a familias que así lo necesiten.
Famosos con niños autistas
John Travolta: Jett Travolta, quien era hijo del famoso actor estadounidense, padecía de autismo. Pero no se supo hasta su muerte debido a que el joven murió a sus 16 años de edad de manera muy extraña mientras se encontraba en vacaciones con su familia.
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Holly Robinson Peete: la actriz protagonista de 21 Jump Street y de Mike & Molly, y oriunda de Filadelfia, escuchó en enero del 2000 las palabras que cambiarían su vida para siempre, según sus propias declaraciones. Su pediatra le confirmó que su hijo padecía autismo, al tiempo que le detallaba todas las cosas que el pequeño sería incapaz de realizar: nunca hablaría, nunca haría amigos, nunca participaría de deportes organizados, y lo que era peor para una madre, nunca escucharía decir de la boca de su hijo las palabras "te amo".
Tanto la actriz como su marido no se quedaron con ese panorama tan desalentador que les planteó el médico en su momento, y aunque ha sido y sigue siendo una lucha de cada día, su hijo sí pudo hacer amigos y puede decirle que la ama todos los días.
Desde su fundación, la actriz lucha por concientizar a la opinión pública acerca de la importancia de convertir a las personas autistas en ciudadanos valiosos y valorados.
Tony Braxton: El pequeño hijo de la cantante y ganadora de los premios Grammy Tony Braxton, fue diagnosticado con autismo a la edad de tres años, y aunque ella comentó en muchas entrevistas lo duro que fue aceptar el diagnóstico, ahora participa activamente en campañas que bogan por el diagnóstico precoz del autismo.
Joe Mantenga: Reconocido por su trabajo como agente del FBI en la serie americana "Criminal Minds", el actor Joe Mantenga, tuvo que enfrentar 25 años atrás el diagnóstico de autismo que le hicieran a su hija Mia, cuando aún no se sabía mucho de esta enfermedad. Tanto el actor como su mujer son incansables portavoces de la importancia de la investigación sobre esta enfermedad.
Olga Tañón: La hija de la cantante Olga Tañón, Gabriella Marie, desde pequeña se conoce que sufre de una enfermedad extraña llamada plaquetas gigantes, pero además de eso la puertorriqueña admitió que también su primogénita tiene autismo.
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Sylvester Stallone: Sage Stallone es hijo del actor estadounidense, fue diagnosticado con autismo cuando tenía tres años de edad, Sylvestre reconoció que Tener un hijo con esta condición es extremadamente triste. Murió de una arteroesclerosis, la cual le causó un ataque al corazón.
Señales de alerta
La pérdida o el retraso del lenguaje
Dificultades en la comunicación verbal y no verbal
Comportamientos repetitivos
Tener apego inusual a los objetos
Contacto visual alterado.
Experimentar angustia inusual cuando se le cambian las rutinas
Otras características del autismo pueden incluir la insistencia en la igualdad, la repetición de palabras, la preferencia por la soledad, poco temor al peligro, haciendo caso omiso de las señales verbales y no responder a los métodos de enseñanza normales.
Las personas con autismo pueden ser muy sensible al tacto, el oído, la vista, el olfato o el gusto (por ejemplo, pueden tener una reacción adversa a los elementos comunes de la casa están encendidos, como un secador de pelo).
